Un hombre francés de 19 años parece haber visto muchas veces Oceans’s Eleven, la película de Steven Soderbergh, y se sintió inspirado en hacer su propia Gran Estafa en un supermercado, al reemplazar la etiqueta del precio de una PS4 por una etiqueta de fruta para pagar apenas 10 dólares. El plan no salió muy bien
Después, quizás tras ver que todavía no se sabe cuándo llega el nuevo juego de Hideo Kojima, decidió vender la consola por 100 euros, para pagar un boleto de tren, según las autoridades. Pero la policía lo atrapó al día siguiente, cuando todavía no había vendido la consola, y fue sentenciado por una corte francesa a 4 meses de prisión. Afortunadamente para él, la sentencia fue suspendida al poco tiempo y solo tendrá que ir a la cárcel si lo vuelven a pillar cometiendo algún robo.
Así acaba la corta carrera criminal de esta mente maestra de las estafas del supermercado. [L’est Republicain vía Kotaku]
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